Qué rollo. Los de Caiga Quién Caiga me han hecho esperar una tanda larguísima de anuncios para ver una esperada entrevista a Mark Knopfler. Despúes, tras hacer ver a la audiencia que no tiene ninguna importancia y que casi nadie sabe quién es, la entrevista, por llamarla de alguna manera, ha durado menos que un anuncio de detergente y ha sido cien veces más ridícula. De hecho, el que le entrevistaba, que normalmente me parecía mono, me ha caído fatal. Más que nada porque antes de él ha salido Bruce, The Boss, y además de dedicarle buen rato casi le hacen reverencias. Si es que no saben.
En contrapunto, compensemos con la entrada de hoy de Vailima. Preciosa foto para mejor texto.